Limpiar la ducha
No hace falta mucho para mantener tu ducha limpia y sin moho, manchas de cal u otros contaminantes. De hecho, solo necesitas algunos productos de limpieza y un poco de paciencia para que los azulejos, las juntas y el resto superficies del baño vuelvan a brillar.
Limpiar la ducha de forma fácil y rápida
Los minoristas especializados ofrecen una gran variedad de productos de limpieza, que suelen venderse como específicos para determinadas aplicaciones. Sin embargo, si contienen productos químicos agresivos o abrasivos, pueden atacar las superficies sensibles la primera vez que se utilizan.
Las juntas son especialmente sensibles a este problema. Muchos otros materiales y superficies también pueden volverse ásperos y cada vez más antiestéticos si se limpian en exceso o con productos de limpieza inadecuados.
Para limpiar la ducha, generalmente solo necesitarás un limpiacristales para las paredes, un limpiador multiusos o jabón suave para el suelo y vinagre o ácido cítrico para eliminar las manchas de cal.
Consejos para limpiar la ducha
Al limpiar, utiliza un paño suave (por ejemplo, de microfibra) y evita utilizar esponjas ásperas en superficies lisas y sensibles. De lo contrario, puedes rayarlas, lo cual afectará tanto a la estética como a la facilidad de limpieza. Y no queremos que eso pase, ¿verdad?
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Para las manchas de cal especialmente difíciles, deja actuar el vinagre durante hasta una hora. Llegarás más fácilmente a los lugares de difícil acceso, como los grifos, si viertes el vinagre en un pulverizador y lo rocías finamente. El olor a vinagre desaparece rápidamente después de enjuagarlo, y, como tiene un efecto desinfectante, también elimina otros olores. Para evitar la aparición de moho, que suele proliferar en ambientes húmedos, utiliza un remedio casero con vinagre.
Puedes eliminar fácilmente la suciedad leve con un paño húmedo y un poco de lavavajillas.
Sin embargo, en el caso de las manchas de cal rebeldes, esto no será suficiente. La mejor forma de eliminarlas es con vinagre: un simple vinagre de mesa es suficiente, así como esencia de vinagre diluida en agua en una proporción de 1:5.
Aplica el vinagre sobre las superficies sucias con un paño o esponja y deja que el ácido acético haga efecto durante unos minutos. A continuación, enjuaga los restos con agua limpia.
Información
La suciedad y los depósitos en la ducha suelen aparecer si el agua del grifo es dura (es decir, más calcárea). La cal se deposita en las superficies y juntas después de la ducha, entre otros, en forma de manchas de agua.
¿Con qué frecuencia debo limpiar la ducha?
Te recomendamos limpiar a fondo los azulejos, los grifos y las juntas una vez al mes (o más a menudo si la ducha se utiliza de forma muy intensiva). A continuación, te mostramos algunas medidas que puedes tomar para evitar la formación de manchas:
Los azulejos también se pueden secar rápidamente con un escurridor de goma. Sin embargo, debes utilizar un paño absorbente después para retirar el agua que quede en el escurridor.
Moho en la ducha: ¿qué puedo hacer?
El moho prolifera en ambientes húmedos y cálidos. No esperes hasta que aparezcan signos visibles; intenta prevenirlo de manera eficaz.
Lo más importante es ventilar bien la habitación con regularidad y asegurarse de que la humedad baje lo más rápido posible después de la ducha (por ejemplo, encendiendo la calefacción o dejándola encendida durante un período de tiempo más largo).
No obstante, si ya han aparecido puntos negros en las juntas, en el techo o en otros lugares de la ducha, debes actuar rápidamente. Existen remedios caseros probados que puede utilizar para eliminar permanentemente el moho:
Alcohol de alta graduación (al menos un 70 % de alcohol en volumen, como el alcohol desnaturalizado) o vinagre: ambos tienen un efecto desinfectante y matan las esporas de moho. También puedes utilizar un eliminador de moho, disponible en ferreterías y parafarmacias.
Sin embargo, es imprescindible garantizar una ventilación adecuada, ya que muchos de estos productos contienen compuestos de cloro. Nunca combines productos de limpieza que contengan cloro y ácido, ya que esto genera gases tóxicos.
Limpia bien el moho con un paño empapado en alcohol o vinagre hasta que no se vean marcas negras ni depósitos de grasa. Para la suciedad más rebelde, utiliza un poco de leche limpiadora mezclada con vinagre o alcohol; conseguirás un efecto desinfectante adicional.
Renovar las juntas con moho
El moho también puede aparecer en las juntas y convertirse en algo más que un problema estético. Si no puedes eliminarlo completamente porque ya ha llegado demasiado lejos en el material de la junta, la única solución es reparar o renovar completamente esta última. En muchos casos, las grietas o los agujeros en juntas minerales (por ejemplo, juntas de mortero o cemento) se pueden reparar. Sin embargo, las juntas de silicona negras, agrietadas o con fugas tendrán que reemplazarse sí o sí.
Antes de limpiar y desinfectar la superficie, se deben eliminar las juntas viejas. Una vez hecho esto, puedes dibujar las juntas nuevas. Si lo haces correctamente, el moho no volverá a aparecer ni proliferar a corto plazo.