
Té negro
Ya se trate de darjeeling, assam o ceylon: en Europa siempre hemos tenido predilección por el té negro. Pero no siempre fue así: hasta el siglo XIX, el más popular era el té verde que se importaba de Asia.
Tras la desafortunada Guerra del Opio contra China, que cerró sus mercados a los narcóticos exportados por los británicos, Europa comenzó a consumir té de la India. Al querer diferenciarse de China, se pasó del té verde al té negro. Todavía hoy, en los países asiáticos se prefiere el té verde.
Así se prepara el té negro perfecto
En la cultura inglesa del té no se puede prescindir del té negro; en la sofisticada hora del té se encumbran variedades de China y la India a la categoría de gourmet.
Sólo con una correcta preparación puede disfrutarse de una experiencia del té perfecta.
Para servirlo, no hay nada mejor que una tetera de porcelana de alta calidad.. El té negro contiene los colorantes naturales terubigina y teaflavina, así como aromas intensos y aceites esenciales.
Con materiales menos lisos, como la cerámica, estos colorantes y aromas pueden adherirse permanentemente. Al mezclar variedades de té distintas, se obtienen combinaciones diferentes que pueden influir negativamente en su sabor.
Según la variedad, se necesitan entre 10 y 15 gramos de hoja de té para obtener un litro de té.
La temperatura del agua debe alcanzar aproximadamente 85 grados. El té negro se prepara en una sola infusión y no debe reposar más que entre 3 y 5 minutos. De ser así, se volvería más amargo.
Es mejor beber sin azúcar el té negro de calidad, ya que de este modo puede disfrutarse mejor el aroma. Unas gotas de leche, nata o leche de almendras lo suavizan, ya que las proteínas que contienen mitigan sus sustancias amargas.
En verano, un té negro frío resulta muy refrescante. Con el método de infusión en frío, el té ha de reposar varias horas en el frigorífico.
Té negro seguro para beber sin infusionar
Ya durante el proceso de elaboración, las hojas de té negro se calientan a 85 grados, lo que neutraliza las bacterias.
¿Es sano el té negro?
El té verde y el té negro se cosechan de la misma planta: camelia sinensis. Se diferencian por el modo de elaboración. A diferencia del té verde, el té negro se deja fermentar. Tras la cosecha se enrolla con unas máquinas especiales para abrir las paredes de sus células. Posteriormente, se almacena a una temperatura de 30 grados con una alta humedad relativa.
Así pueden desplegarse las características de sus aceites esenciales. Las sustancias del té verde y del té negro se diferencian por medio de distintos procesos de elaboración. Durante el proceso de fermentación se pierde una gran parte de las sustancias vegetales secundarias.
Son precisamente estas sustancias las responsables de muchos de los saludables efectos del té verde. De ahí que esta última variedad sea útil en la prevención de la diabetes o de diferentes tipos de cáncer. No obstante, el té negro también es una bebida saludable.
Contiene importantes vitaminas como la vitamina B y minerales y oligoelementos como el manganeso y el potasio. El té negro tiene también efectos revitalizantes y estimulantes.
Al igual que el té verde, contiene flúor. Este contribuye a la conservación de los dientes y los huesos. A diferencia del té verde, el té negro contiene más taninos. Por ello, resulta más ligero y más fácil de digerir para personas con sensibilidad estomacal. Es útil en casos de gastroenteritis dado su efecto ligeramente astringente.
La catequina que contiene el té negro estimula la circulación y puede ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares. Generalmente, un té de mejor calidad contiene una mayor concentración de sustancias activas.Algunas pruebas han detectado en algunas variedades de té negro residuos de pesticidas. Por ello, lo mejor es hacerse con variedades de agricultura ecológica.
Artesano
Tazas de doble pared
Artesano
Tazas de doble pared
Una comparativa
¿Expreso o té negro?
El té negro contiene cafeína y tiene efectos estimulantes. A menudo se consume en lugar del café. Pero, ¿qué es más estimulante, el té negro o el café? La cafeína del té es absorbida por el cuerpo más lentamente, pues va unida a los taninos. Su efecto revitalizante no se produce tan rápido como con el café, pero es más duradero.
No obstante, el té negro contiene solo aproximadamente la mitad de la cafeína del café y apenas un cuarto de la cafeína de un expreso. Quien necesite un estimulante rápido, debería inclinarse por un expreso.
Tomar más de cuatro tazas de expreso es poco saludable y puede producir nervios o agitación. El té negro se digiere mejor, por lo que puede disfrutarse de varias tazas.
Debido a su contenido en cafeína, no debería tomarse té negro una vez avanzada la tarde. Dado que su efecto revitalizante se dilata en el tiempo, nos puede mantener despejados también por la noche. No obstante, hay también variedades de té negro sin cafeína: ideales para una tarde de bienestar con una bonita taza en las manos.